En los últimos años me he dedicado a explorar y combinar cosas que me gustan y que pueden ayudar a los demás: lo que estudié, lo que me apasiona y lo que disfruto hacer. Siempre he sentido curiosidad por el mundo de la nutrición, la salud y también por la investigación —ya sea de productos, mercado o tendencias relacionadas con el bienestar (bueno, y entre ellas el mundo de las tendencias y la moda, que eso es algo que es parte de mi día a día).

Después de completar mi maestría en Madrid, decidí quedarme en España varios años. Esa etapa marcó profundamente mi vida: tuve la oportunidad de viajar, explorar nuevos sabores, descubrir rincones especiales y, sobre todo, formarme en lo que más me apasiona. Estudié Nutrición y Dietética en la Universidad de Aberdeen, y me sumergí también en el mundo del café de especialidad —algo que me conecta desde pequeña con mis raíces en Puerto Rico, cuando recorría fincas cafeteras junto a mi familia. Me formé en Castelldefels, Barcelona, y tiempo después lancé un pequeño negocio de té al por mayor en Sevilla y de café, uniendo sabor, salud y emprendimiento.

Desde niña me ha encantado investigar, leer etiquetas, conocer ingredientes y entender qué hay detrás de los productos que consumimos. Esa pasión me llevó a desarrollar un servicio de Compra Inteligente, primero en España y ahora también en Puerto Rico, ayudando a personas y negocios a tomar decisiones más conscientes. Me encanta explorar todo lo que tiene que ver con la salud y el bienestar de dentro hacia afuera.

Hoy combino todo ese camino y experiencia a través de Sheithings, donde promuevo el bienestar cuidando mente, cuerpo y piel como un todo.

Recientemente integré a mi práctica el arte del masaje facial Kobido, una técnica ancestral japonesa que no solo mejora la apariencia de la piel, sino que trabaja profundamente en la relajación, la circulación y la armonía interior. Porque creo que el verdadero bienestar comienza desde adentro… y se refleja por fuera.

Estoy convencida de que los buenos hábitos nutricionales no deben ser sinónimo de restricciones. Comer bien puede ser delicioso, reconfortante y un acto de amor propio. Y cuidar de tu piel, de tu cuerpo y de tus emociones debe sentirse como una rutina de placer, no una obligación.

Si necesitas apoyo para mejorar tu estilo de vida, si tienes una tienda o restaurante y quieres transformar tu propuesta, o simplemente deseas comenzar a cuidarte con más intención, aquí estoy para acompañarte.

También te invito a seguir mi blog, donde comparto experiencias, reflexiones y colaboraciones con otros profesionales. Y si eres nutricionista, coach o terapeuta del bienestar y quieres participar, ¡escríbeme!